Un test muy productivo en Motorland, me devolvió mucha confianza después del complicado GP de Jerez y llegaba a LeMans con ganas de disfrutar en un circuito que siempre he logrado ser rápido.
Desde el primer libre me propuse trabajar completamente solo, intentando subir mi propio nivel de exigencia y así consiguiendo información de mejor calidad para mejorar tanto la moto como mi estilo de pilotaje.
Desde la primera vuelta logré tiempo rápidos y por primera vez me sentía con la confianza de rodar solo y siendo competitivo.
El primer entreno fue mejor de lo esperado y terminé 9º a tan solo 0.5s del primero.
En el segundo entrenamiento libre empecé con un “long run” de 12 vueltas para trabajar en mi ritmo con gomas usadas, también rodando completamente solo, y pude trabajar en mejorar detalles de mi pilotaje y así rascar decimas de segundo en cada curva.
Mi ritmo fue muy bueno y para terminar el entreno monté un neumático blando trasero para atacar a una vuelta. Pero en mi primera vuelta lanzada tuve un highside fuerte que me dejó sin poder marcar ningún buen tiempo con neumáticos nuevos.
El sábado por la mañana volví a hacer una tanda larga para recuperar mi confianza y con neumáticos usados ya pude mejorar medio segundo mi mejor tiempo del día anterior.
Cuando monté el juego de gomas nuevas me sentí realmente bien y fui muy rápido rodando en solitario, siendo el primer piloto en bajar el record del circuito con varias vueltas consistentes, aunque al final terminé 3º en la combinada de libres.
Me estaba sintiendo muy competitivo y sabía que podía lograr una muy buena posición en parrilla.
De nuevo monté el compuesto de neumático más blando para empezar el cronometrado, y tan solo después de dar mi primera vuelta lanzada, tuve una caída muy fuerte que me dejó fuera por el resto de entrenamiento.
La única vuelta que había podido dar me colocaba en la 22ª posición de parrilla, pero lo peor era que ni siquiera sabía si podría correr.
Tenia muchísimo dolor en la pelvis ya que aterricé bruscamente de espaldas contra el suelo, así que me trasladaron al hospital mas cercano para hacerme un TAC y descartar cualquier tipo de fractura.
Fue una tarde difícil, ya que llegue al hospital a las 13h y hasta pasadas las 20h no me sacaron de dudas. Por suerte, solo era una contusión muy fuerte y podría correr la carrera.
Revisando los datos, junto a mi equipo llegamos a la conclusión de que en este circuito y con nuestra puesta a punto, el neumático blando excedía el nivel óptimo de agarre y fue lo que provocó tanto mi caída del viernes por la tarde, como la del sábado en el cronometrado, ya que en los datos de telemetría no se veía que pasase más rápido ni que acelerase más agresivo que en otras salidas, y en ambas ocasiones fueron las únicas veces que probé ese neumático, además de que otros equipos tuvieron problemas similares.
Eso me dejaba bastante tranquilo, ya que entender el por qué de una caída siempre ayuda a no perder confianza, pero por otra parte estaba cabreado porque había demostrado tener un gran ritmo y por culpa de esa caída iba a tener que esforzarme para poder remontar y llegar al grupo de cabeza antes de que se abriese un hueco.
El warm up fue duro, después de pasar toda la tarde en el hospital, me sentía muy “acartonado” y poco ágil, aparte de con bastante dolor. Aun así, pude marcar un buen ritmo y pude recuperar confianza antes de salir a carrera.
Al final tomé la decisión de salir infiltrado a carrera, y así tener garantía de llegar hasta el final sin ningún tipo de problema.
Mi salida fue muy buena y en la primera vuelta ya conseguí remontar casi 10 posiciones.
En las dos siguientes vueltas mis tiempos fueron rápidos y me sentía muy cómodo con la moto en general. Podía frenar fuerte y pasar a gente sin arriesgar demasiado.
Tenia claros tres o cuatro puntos de adelantamiento donde era fuerte frenando y allí era donde iba recuperando posiciones.
En el inicio de la cuarta vuelta de carrera ya me encontraba en 11ª posición, pero los diez primeros pilotos habían empezado a abrir algo de hueco cuando yo conseguí llegar a esa posición.
Estaba a tan solo 0.7 segundos de Arbolino, que cerraba el grupo del top-10, y tanto en el primero como en el segundo sector estaba recortando distancias.
Pero al llegar a la frenada de la curva 8, solté los frenos justo al pasar el cambio de rasante que hay en la entrada de la curva y eso descargó mi suspensión delantera más de lo normal, lo que provocó que se me cerrase la dirección y me fuese al suelo...
Probablemente ha sido el fin de semana en el que he dado el paso más importante para mi, y he sido capaz de rodar, por primera vez, en tiempos constantes y de cabeza completamente en solitario, pero se ha quedado reflejado en “nada” por culpa de la caída en el quali que me hacía salir tan retrasado y con la necesidad de tomar más riesgos de los que debería.
Es una verdadera lastima irnos de LeMans con las manos vacías por primera vez, y me siento realmente decepcionado conmigo mismo, pero a la vez estoy más motivado que nunca porque me veo más cerca que nunca de mis objetivos.
De las caídas y los momentos difíciles se aprende y este fin de semana me llevo eso a casa. Seguimos creciendo como equipo, a por Italia!!!